jueves, 27 de septiembre de 2012

Señor Rajoy:


Tras verle y oírle hablar desde New York City y reponerme del susto quería hacerle una pequeña invitación. Mire usted, resulta que yo pertenezco a esa mayoría de españoles que no estuvo en la manifestación del 25S. Es más,  incluso soy de los que no sale en las portadas de los medios de comunicación y,   fíjese qué cosas,  jamás nadie ha abierto un telediario con mi persona. Pues bien, aparte del desagrado que me produce recibir sus ánimos o su comprensión  (o directamente del asco que me da enterarme de que para usted la actual situación de España es 'fascinante') mientras cierra y abre los  ojos con ese tic delator de mentiroso compulsivo que -por el bien de todos, el suyo propio incluido, se lo digo- ya debería  hacérselo mirar,  le pediría por favor que tenga en cuenta la humilde invitación de que le hablaba más arriba: ¡Únase a nosotros! No se manifieste nunca más, en ninguna de las acepciones de la palabra, no aparezca jamás en adelante ni por equivocación en las portadas de cualesquiera  medio de comunicación español o extranjero,  no abra ni cierre ni rellene más nunca en la vida un solo telediario  ni en todo el orbe ni más allá (no vaya a ser) y  -parafraseando a su infecto hacedor- como paso evidente e indispensable para todo ello, ¡váyase, señor Rajoy! ¡Váyase!


martes, 25 de septiembre de 2012